Que la cultura delicatessen se está poniendo más de moda no es una novedad. El apoyo a la comida sana, con grandes embajadores a nivel mundial como el chef británico Jamie Oliver, o la influyente Michelle Obama, junto con el fenómeno televisivo global del programa Masterchef y la nueva corriente de los “foodies”, personas jóvenes interesadas por la “alta cuisine” a elaborar en casa, están ayudando a potenciar el gusto por los alimentos naturales y muy elaborados.
Dentro de la alimentación gourmet, la sección de pasteles y dulces siempre ha sido una de las más atractivas para pequeños y mayores, y el interés por probar elaboraciones más exquisitas está propiciando la apertura de pequeños establecimientos con recetas muy personales y realmente extraordinarias.
Paseando por Valencia, una de las capitales de la costa mediterránea española, nos encontramos con Avenue Macaron, una deliciosa sorpresa en el centro de la ciudad, a tan sólo unos metros del ayuntamiento.
Sus propietarios, tras regentar un establecimiento durante años en Toulouse, al Sur de Francia, decidieron trasladarse a Valencia y abrieron en 2014 esta pastelería artesanal para ofrecer este delicado arte repostero francés, aún muy desconocido en España. Ellos mismos elaboran los deliciosos macarons en 30 sabores diferentes, tan llenos de color como de imaginación. Éstos son algunos de los sabores más originales que pueden encontrar en su carta: Rosa, Flor de Azahar, Vinagre Balsámico, Té Matcha y Pomelo, ó Foie Gras, éste último sólo disponible por encargo previo. ¿Y qué les parece este macaron de Yuzu y Wasabi para los amantes de la cocina japonesa?
Según nos comentan en el local, muchas de sus ventas proceden de los turistas, que se quedan cautivados por su colorido y apetecible escaparate. Además de potenciar la venta de impulso, para el público más local y como venta más planificada, Avenue Macaron ofrece presentaciones personalizadas para eventos especiales.
La decoración del local va acorde con la dulzura y glamour de sus productos. Esferas transparentes de varios tamaños cuelgan desde el techo con macarons de colores dentro, creando un moderno y sofisticado efecto visual y a la vez promoción del producto. Para el establecimiento líneas y colores sobrios: madera y metal con tonos arena, y para el producto elegantes cajas que combinan el negro y el rosa. En conjunto, una delicia para los sentidos.
Por Mónica García Bustamante para América Retail StoreTours
Business Strategy, Marketing & Sales International Expert